En la detención participaron efectivos de un grupo militar de operaciones especiales. Los detenidos salieron del edificio esposados y subieron a autobuses. En la sede del Estado Mayor se está llevando a cabo un registro.
Turquía vivió en la noche del viernes un intento de golpe protagonizado por un grupo de militares que secuestraron al jefe del Estado Mayor, anunciaron la destitución de los dirigentes, atacaron varios edificios gubernamentales y desplegaron carros de combate en Ankara y Estambul.
En la madrugada del sábado, el Gobierno turco informó haber sofocado el motín, que se saldó con 161 muertos y 1.440 heridos.
Más de 2.800 militares fueron arrestados a raíz de la intentona golpista.