Esta ideología se llama Kemalismo y consiste en una serie de preceptos en los que se basa el Estado de la República de Turquía actual, como la democracia, el nacionalismo y el secularismo. Las Fuerzas Armadas turcas, en reiteradas ocasiones, han usado la fuerza para, tal y como se les encomendó, 'proteger y restablecer' esos principios.
Golpe de 1960
El incidente tuvo lugar en un momento de agitación sociopolítica y de dificultades económicas para el país. El primer ministro, Adnan Menderes, planeaba una visita a la Unión Soviética, con la esperanza de establecer líneas alternativas de crédito debido al agotamiento de la ayuda estadounidense en el marco de la Doctrina Truman y el plan Marshall.
Los golpistas, contrarios a esa iniciativa, encarcelaron y ejecutaron a varios altos funcionarios de la administración de Menderes. Un mes más tarde, el poder fue devuelto a las autoridades civiles, sin embargo, el Ejército continuó dominando la escena política hasta octubre del año 1965.
Memorándum militar de 1971
Firmado por varios altos mandos de las Fuerzas Armadas e "inspirado en las ideas de Ataturk", este contenía un ultimátum a la élite política del país, que exigía "la formación, bajo los principios democráticos, de un Gobierno fuerte y legítimo, que neutralice la situación anárquica actual".
Sin embargo, después de esta acción, la oleada de violencia tomó todavía más impulso y acabó obligando a los militares a declarar el toque de queda en 11 de las 67 provincias del país. La represión militar se prolongó durante dos años, hasta que en octubre de 1973, el Partido Republicano del Pueblo ganó inesperadamente las elecciones bajo el mando de Bulent Ecevit.
Golpe de 1980
Antes del alzamiento, el general Evren ya había expresado su descontento por la grave situación económica que atravesaba el país y la ola de atentados terroristas. Este golpe fue el más sangriento de los que han tenido lugar en Turquía, con más de 150.000 detenciones, así como cientos de asesinatos y casos de personas desaparecidas que nunca fueron esclarecidos.
Golpe de 1993
En 1993 la política turca también vivió algo que muchos consideran un golpe de Estado. Varios altos funcionarios, incluyendo el presidente del país, Turgut Ozal, fueron asesinados durante un corto período de tiempo y las acusaciones cayeron rápidamente sobre la cúpula militar.
Detrás de esta lucha de poder estaba la voluntad del presidente Ozal de pactar un plan de paz con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán, lo que provocó una gran indignación entre los militares, quienes lo acusaban de traición. Inmediatamente después del asesinato del presidente, los kurdos protagonizaron un avance en sus posiciones que provocó la respuesta de los militares, en este contexto se enmarcan las masacres de Sivas el 2 de julio y Basbaglar el 5 de julio de ese año.
Memorándum militar de 1997
Además, prohibieron su partido de carácter islámico, el Partido del Bienestar, lo que produjo la caída del gobierno de coalición. En las elecciones generales de 1999, otro partido de inspiración islámica, el llamado Partido de la Virtud, tomó el poder.
E-memorándum de 2007
Muchos calificaron el hecho como una insinuación de que se podría llevar a cabo un golpe de Estado, en caso de que el candidato favorito —el político islámico moderado Abdullah Gül— ganara las elecciones. El entonces portavoz gubernamental, Cemil Cicek, calificó tal declaración como una interferencia en las funciones gubernamentales.