"Ayudé a que Eduardo Cunha fuera elegido presidente, en el plenario es posible que el haya sido el mejor presidente que jamás hayamos tenido, pero quizá haya tenido demasiado poder; no voy a protegerlo ni a perseguirlo", dijo anoche Maia, poco después de ser elegido presidente.
Ahora Maia deberá lidiar con el proceso que podría acabar con la pérdida del mandato de diputado para Cunha; cuando la Comisión de Constitución y Justicia (CCJ) termine su trabajo el caso pasará al plenario de la Cámara, donde el conjunto de los diputados decidirá sobre el futuro de Cunha.
En este sentido Maia ha avisado ya de que esperará que haya el "quórum adecuado" para realizar esa votación, remarcando que es importante que estén presentes el mayor número de diputados para dar más legitimidad a la decisión.
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Esta postura sería negativa para los intereses de Cunha, que con menos diputados presentes en la Cámara tendría más margen de maniobra para llevar a cabo sus estrategias y convencerles de que salven su mandato de diputado, y con él, el foro privilegiado ante la Justicia.