"Queremos comprender las explicaciones de la OTAN sobre sus decisiones adoptadas en la cumbre de Varsovia y es que las declaraciones públicas no son alentadoras", dijo Lavrov en una rueda de prensa en la capital kazaja.
El canciller ruso lamentó que en el bloque militar noratlántico prevalezca el ánimo de buscar en Rusia un enemigo para "exigir unidad en sus filas y una posición consolidada" y añadió que Rusia se muestra dispuesta a colaborar con la Alianza Atlántica en el marco del Acta Fundacional OTAN-Rusia.
Sin embargo, el diplomático ruso subrayó que no fue Rusia la que congeló el mecanismo de cooperación, en particular el trabajo del Consejo Rusia-OTAN.
"Como congeló este mecanismo, debe dar pasos para reanimar el Consejo (Rusia-OTAN)", dijo.
Lavrov recordó que los colegas occidentales presentaron la celebración de la reunión del Consejo Rusia-OTAN, prevista para este miércoles, como un gesto de "buena voluntad".
Este miércoles está prevista la segunda reunión del Consejo Rusia-OTAN en cuatro meses, tras una pausa de dos años por la crisis ucraniana y la incorporación de Crimea.
En la cita Rusia tiene previsto abordar el aumento de la actividad del bloque militar cerca de sus fronteras, según lo consignó anteriormente el embajador del país ante la OTAN, Alexandr Grushkó.
A mediados de mayo entró en servicio el sistema estadounidense Aegis Ashore en la base rumana de Deveselu, a unos 600 kilómetros al oeste de la península de Crimea.
EEUU planea construir otra infraestructura similar con radares y misiles interceptores en Polonia, en la base de Redzikowo, a unos 180 kilómetros del enclave ruso de Kaliningrado.