"La relación con Estados Unidos es la de los compañeros de viaje, socios estratégicos que trabajan en pos de la seguridad en América del Norte. El desarrollo, la prosperidad en Estados Unidos, se construye sobre la prosperidad de sus países vecinos", ha afirmado el mandatario.
En 2015, Donald Trump propuso construir un muro en la frontera entre los dos países para evitar la llegada de "personas que tienen un montón de problemas y que van a traernos esos problemas. Están trayendo drogas. Están trayendo crimen. Son violadores, y algunos, supongo, son buenas personas".
Peña Nieto, por supuesto, no está de acuerdo con tales generalizaciones, que arruinan la imagen de los mexicanos, porque, recuerda el mandatario, criminales hay en todos los países.
"No mucha gente sabe, por ejemplo, que todos los días, un millón de personas cruza la frontera entre México y EEUU, y lo hace legalmente".
"No sé si alguna vez estas batallas llegan a su fin —afirmó el presidente con respecto a la guerra contra el narcotráfico—. Pero lo que puedo decir es que este gobierno ha sido capaz de revertir la tendencia creciente de la inseguridad que nuestro país tenía en 2012. El número de delitos tales como asesinatos, secuestros y extorsiones ha bajado".
Finalmente, Peña Nieto celebra que México sea un lugar más seguro, pero reconoció que el país tendrá que "seguir luchando".