La expedición del Instituto de Historia de Cultura Material de la Academia de las Ciencias de Rusia ha examinado el fondo del estrecho de Kerch con equipos de última generación y ha hallado una construcción que, al parecer, formaba parte de una zona residencial de la antigua ciudad, que se hundió lentamente hasta desaparecer bajo las aguas.
El primer estudio arqueológico en la zona de Takil se llevó a cabo en 1929, mientras que el segundo se produjo en el año 1976. El interés por la ciudad sumergida aumentó en la década de los 80, cuando se encontraron 150 monedas antiguas en la zona, pero en los años 90 las investigaciones se vieron interrumpidas.
Hace seis años, los arqueólogos reanudaron sus trabajos. Este año, los estudios están siendo llevados a cabo no solo en el ámbito marino, sino también en la tierra. La expedición espera recopilar más información acerca de este valioso yacimiento histórico.