Yemen escapó de una gran guerra, pero el futuro del país aún no está claro

Yemen es escenario de violentos enfrentamientos entre los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá y los partidarios del expresidente Alí Abdalá Saleh, además de las fuerzas leales al presidente legítimo, Abdo Rabu Mansur Hadi, a las que apoya desde marzo de 2015 una coalición de países del Golfo Pérsico y África del Norte liderada por Arabia Saudí.

Desde abril, las partes del conflicto yemení mantienen conversaciones en Kuwait sobre la solución del conflicto.

Fracaso de Riad

Los resultados de la operación de Arabia Saudí que dura más de un año en Yemen, mostraron que las fuerzas armadas de Riad no están en su mejor estado, lo que contribuyó en gran parte al inicio de las consultas diplomáticas para resolver el conflicto en Kuwait, dijo el director adjunto del Instituto de la Comunidad de Estados Independientes, el experto militar, Vladímir Evséev.

"Arabia Saudita como una fuerza militar se desacreditó en sí, era muy claro que no podía luchar", recalcó el experto.

Evséev lo explicó por el gran número de víctimas y la incapacidad para llevar a cabo operaciones ofensivas a gran escala.

"En estas condiciones necesitaron algún tipo de acuerdo, porque estaba claro que con la fuerza no podían resolver el problema", añadió.

Al mismo tiempo el experto señaló, que los temores de muchos observadores extranjeros de que el conflicto yemení se convierta en una plataforma para una guerra indirecta entre Arabia Saudí e Irán, en fin no se materializaron.

"La influencia de Irán en Yemen fue en gran medida inventada, porque si Irán estuviese implicado en la situación sería diferente y tendríamos un análogo de Irak, por lo que vemos, podemos concluir que Irán probablemente interferirá, pero de una forma limitada", dijo Evséev.

Asimismo, Evséev afirmó que las acciones de Riad dieron como resultado el fortalecimiento de las fuerzas radicales en Yemen.

"Tal vez los saudíes localizaron a los hutíes y resolvieron su tarea (…) ahí (en Yemen) aparecieron muchos radicales y esto es también un problema, esperemos que no tengan que dejar de enfrentarse con los hutíes y con la ayuda de los hutíes (enfrentarse) contra los islamistas radicales", dijo el experto.

Conflicto conservado

Sin embargo, según coincidieron los participantes de la mesa redonda, el grado de tensión del conflicto de Yemen comenzó a disminuir.

"Es necesario afirmar que la situación ha mejorado, ya no se registra una intensidad en los combates comparado en con el año pasado, la situación más o menos se normaliza, aunque por supuesto, es bastante complicada debido a las pérdidas humanas y daños a la infraestructura", dijo el profesor de Ciencias Políticas de la Escuela Superior de Economía de Rusia, Leonid Isáev,

Según el experto, esas tendencias positivas en realidad pueden deberse al hecho de que Riad cree que ha conseguido sus objetivos.

"Gracias a la operación han sido capaces de detener la propagación de los hutíes en el territorio de Yemen, desde el punto de vista de la Arabia Saudí, la amenaza de la creciente influencia de los hutíes ahora no existe", dijo Isáev.

Según el especialista, las perspectivas positivas para la recuperación de Yemen en las consultas en Kuwait, aún no son visibles.

"Hasta el momento no se logra encontrar puntos comunes ni en el tema de una posible división de Yemen, ni sobre la federalización o un Gobierno de transición", aseguró el experto.

Isáev concluyó que "podemos registrar el deseo de que el conflicto permanezca, pero sobre como se construirá el futuro de Yemen, el día de hoy es muy difícil de decirlo".