"Es necesario, sobre todo para la OTAN, dejar de avanzar rumbo a los intentos de esta presión militar sobre la Federación de Rusia, cesarlos y comenzar a desmantelar gradualmente todo lo que está desplegado por hoy en los países bálticos", dijo en entrevista a la emisora Kommersant FM.
El representante ruso precisó que las rotaciones de fuerzas de la Alianza no se diferencian en realidad del despliegue permanente.
"Desde el punto de vista militar, es algo peor, porque permite a una mayor cantidad de militares, mayor cantidad de unidades dominar, empleando el lenguaje militar, el potencial teatro de operaciones", declaró.
Grushkó reiteró que la situación actual es difícil e instó a la OTAN a entender que estas actividades no ayudarán a cambiarla.
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Rusia asegura que la OTAN lleva a cabo un paulatino avance hacia el este, que Moscú percibe como una amenaza para su seguridad.
A mediados de mayo entró en servicio el sistema antimisiles estadounidense Aegis Ashore en la base de Deveselu, en Rumanía, a unos 600 kilómetros al oeste de la península rusa de Crimea.
EEUU está construyendo otro puesto similar con radares y misiles interceptores en la localidad polaca Redzikowo, a unos 180 kilómetros del enclave ruso de Kaliningrado.
