"Había quienes auguraban otro Afganistán o cosas por el estilo. Nunca va a ocurrir", dijo Lukiánov en los pasillos de un encuentro internacional sobre seguridad celebrado en Grozni.
Los planes militares de Rusia en Siria, aseveró, "con toda seguridad son limitados".
"Les estamos ayudando pero, como veis, en un formato limitado", añadió.
La Unión Soviética se implicó en el conflicto interno de Afganistán en 1979 enviando un contingente militar para apoyar a una de las facciones que disputaban el poder en Kabul. La intervención derivó en una guerra con los muyahidines que se prolongó hasta 1989.
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En septiembre de 2015, Rusia lanzó una operación aérea a petición del Gobierno de Bashar Asad para frenar el avance de los yihadistas en Siria.
Tras casi medio año de bombardeos activos, anunció la retirada parcial de sus efectivos pero dejó claro que mantendrá presencia militar en el puerto sirio de Tartus y en el aeródromo de Hmeymim.
