Así lo publicó este lunes el diario brasileño Folha de Sao Paulo que apuntó a la existencia de unas grabaciones de 75 minutos obtenidas por la Fiscalía General de la República en el mes de marzo en las que Jucá, considerado el hombre de confianza del presidente interino Michel Temer, prometió "estancar la sangría" de las investigaciones de la Policía Federal una vez el gobierno interino tomase posesión.
"Tenemos que resolver esa mierda. Tenemos que cambiar el gobierno para estancar la sangría", respondió Jucá quien no dudó en valorar que las investigaciones sobre la corrupción en el PMDB "no pueden estar en la mano del juez Moro" al que el ministro calificó de "Torre de Londres" en referencia a las torturas que ocurrían en el mayor presidio de la capital inglesa en la Edad Media.
Por último, el ministro habló de construir un pacto nacional desde el nuevo gobierno con los miembros del TSF, sin embargo, aunque las dificultades de convencer a algunos de ellos uno de ellos sería el magistrado Teori Zavascki quien es el encargado de dirigir las investigaciones de la Operación Lava Jato desde la Corte Supremo las cuales apuntan directamente a Jucá.
Romero Jucá, quien además sustituyó a Michel Temer como nuevo líder nacional del PMDB en el mes de abril, fue acusado por miembros de las constructoras Camargo Correa y Andrade Gutierrez como receptor de sobornos provenientes de los contratos para las obras de la central nuclear Angra 3 y la hidroeléctrica de Belo Monte.
Por su parte, el ministro de Casa Civil, Eliseu Padilha, y el secretario especial de gabinete, Moreira Franco, ambos exministros en el gobierno de Fernando Henrique Cardoso, fueron acusados de recibir sobornos a cambio de facilitar el nombramiento del exsenador del Partido de los Trabajadores (PT), Delcidio Amaral, como director de Petrobras en 1999.
Existen claras sospechas de que el expresidente de la Cámara de los Diputados e impulsor del "impeachment", Eduardo Cunha, del PMDB, habría ofrecido un pacto para enterrar la Operación Lava Jato a los diputados investigados de los partidos minoritarios del Congreso Nacional a cambio de un apoyo durante la votación del "impeachment" en la Cámara de los Diputados el pasado 17 de abril.