La portavoz de la corporación Boeing, Rebecca Regan, anunció que el aplazamiento se debe a la reducción de la masa del aparato, problemas con lanzamiento y ascenso y requisitos de sofrtware adicionales.
La nave cuyo vuelo estaba previsto para finales de 2017 brindará a la NASA la posibilidad de enviar misiones tripuladas a la Estación Internacional Espacial (EEI).
Según Regan, "Boeing se siente muy orgullo" por ser la primera empresa de EEUU que podrá enviar una nave espacial tripulada a la EEI, pero dio prioridad a la seguridad y no al calendario.