El concierto titulado "Oremos por Palmira, la música resucita a los restos antiguos" inició con un mensaje del presidente de Rusia, Vladímir Putin, a través de una videoconferencia y fue transmitido en directo por la televisión siria.
Guérguiev y su orquesta interpretaron durante una hora piezas de Prokófiev, Shchedrín y Bach ante unos 400 espectadores, entre ellos ministros sirios, responsables del Ejército nacional de Rusia y soldados rusos.
La fecha del concierto —5 de mayo— coincidió con la entrega del cuerpo del oficial de las Fuerzas Aeroespeciales rusas, Alexandr Projorenko, quien falleció tras ordenar el fuego a su posición luego de verse rodeado por terroristas.
La ciudad de Palmira fue arrebatada a los yihadistas a finales de marzo por el Ejército sirio y el grupo Halcones del Desierto.