El nuevo aparato, dotado con celdas de combustible hídrico-aéreas, será elaborado en cooperación con el Instituto de Problemas de Física Química (IPJF, por sus siglas en ruso) de la Academia de Ciencias de Rusia.
Según el jefe del laboratorio de iónica del IPJF, Yuri Dobrovólski, el nuevo multicóptero es diseñado para desempeñar dos papeles posibles. La primera variante prevé el enfoque de la larga permanencia en el aire con una carga ligera, mientras que la segunda opción será llevar una carga pesada —hasta 25 kilogramos- durante un corto período de tiempo.
El octocóptero que logró batir el récord mundial de vuelo fue el primer proyecto conjunto entre IPJF y NELK que demostró el potencial del sistema de propulsión a base de la energía electroquímica.
Las pilas a base de hidrógeno se consideran entre las más prometedoras para su uso en varios dispositivos y se estudian rigurosamente por muchas empresas en todo el mundo. Se cree que los logros en esta rama beneficiarán no solo a la industria de los vehículos no tripulados, sino también al sector automotriz, aéreo y electrónico.