Unas 350.000 personas requieren ayuda humanitaria, que llega a Ecuador desde varios países, agencias de la ONU y diversas organizaciones no gubernamentales, señala un comunicado publicado en el sitio de noticias del foro mundial.
La cifra de muertos por el sismo de magnitud 7,8 llegó a 658, mientras los heridos suman 27.638, según los últimos datos oficiales.
Asimismo 7.000 edificios quedaron totalmente destruidos y otros 2.740 resultaron afectados, entre ellos, 281 escuelas, por lo que 120.000 niños se quedaron sin asistir a clases, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
"Más de 65.000 personas han recibido kits de comida para tres días en las provincias de Manabi y Esmeralda (oeste). El Programa Mundial de Alimentos (PMA) prevé además mandar transferencias de dinero y llevará a cabo una evaluación de la seguridad alimentaria en coordinación con el Gobierno y los socios humanitarios", dijo este lunes Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Unicef ha distribuido pastillas para purificar el agua, tanques de agua y contenedores, además de instalar letrinas en las zonas más afectadas.
La ONU y el Gobierno de Ecuador intentan reunir 72,7 millones de dólares para asistir a la población en los próximos tres meses.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU asignó a Ecuador siete millones de dólares del Fondo Central para Respuestas de Emergencia.