"La ayuda humanitaria rusa fue distribuida entre la población en 74 localidades en las provincias de Damasco, Alepo, Latakia, Homs y Daraa", dijo el teniente general, Serguéi Kuralenko.
La carga llevaba más de 700 toneladas de alimentos, medicinas y otros artículos de primera necesidad.
Desde el pasado 27 de febrero en Siria rige un alto el fuego, acordado por EEUU y Rusia, cuyos militares controlan permanentemente la situación y han reportado múltiples violaciones.
La tregua, avalada por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, no se aplica a los grupos declarados terroristas por Naciones Unidas, entre ellos Daesh y el Frente al Nusra, proscritos en Rusia y en otros países.