Las cifras han sido publicadas luego del accidente en la planta petroquímica Pajaritos, en el puerto de Coatzacoalcos, en las costas del Golfo de México, con saldo provisorio de 24 trabajadores muertos y 136 heridos, 13 de ellos en estado grave y 19 hospitalizados con quemaduras en 70 y 80 por ciento del cuerpo.
Los reportes de los seguros contratados por Pemex en sus instalaciones por casi una década, indican que los costos de los accidentes se han multiplicado por más de 30, comparado con el año 2009, cuando la petrolera contrató los seguros con el banco propiedad del magnate Carlos Slim, de acuerdo con datos publicados este viernes por El Financiero.
En los años 2011 y 2012, los reclamos de la petrolera a la aseguradora Inbursa bajaron de nuevo: los accidentes costaron 76 y 52 millones de dólares en esos años, respectivamente.
Pero en 2013, Pemex elevó el reclamo de compensaciones por siniestros a 257 millones de dólares, debido a la explosión por fuga de gas en el sótano de una de las dos torres gemelas de la emblemática sede corporativa de Pemex, en la Ciudad de México, que costó 34 millones de dólares, y la explosión de un pozo petrolero en Tabasco que costó 204 millones de dólares.
Pérdidas de las aseguradoras
Los pagos en 2015 representaron pérdidas para la aseguradora de Carlos Slim, por "la póliza integral" con la cual Pemex contrató los servicios de "aseguramiento de daños físicos directos para todas sus instalaciones en tierra y mar".
La prima total que Pemex pagó a Inbursa, en el bienio 2013-2015 fue de 426 millones de dólares, la mitad de los daños reportados en 2015, hasta que el negocio perdedor fue abandonado por el magnate –uno de los hombres más ricos de mundo-, luego de una década vendiendo seguros a Pemex.
La póliza del bienio vigente actualmente, 2015 —2017, subió a 428 millones de dólares, y fue comprada por Pemex a la aseguradora Mapfre, que es ahora responsable por compensar las pérdidas humanas y materiales del accidente de miércoles, cuyo monto aún no ha sido estimado.
Inbursa se retiró del negocio endeudado con la petrolera: tenía a cierre del año pasado 2015 una deuda pendiente con Pemex por daños en accidentes la suma de 1.441 millones de dólares en "siniestros pendientes de pagar", según los reportes financieros.