ESTOCOLMO (Sputnik) — "Voy a luchar por el nacional-socialismo mientras viva, puede que hace cinco años atrás fuera un luchador racial europeo más fanático, pero eso fue antes, cuatro años atrás tomé el rumbo de la lucha pacífica", declaró en el marco de un litigio contra el Estado noruego por las "condiciones inhumanas" de su prisión.
Los medios de prensa noruegos se abstuvieron de emitir el juicio en directo, sin embargo, las declaraciones del reo pueden ser leídas en el sitio web de la compañía de radio y televisión noruega NRK.
El juicio se extenderá hasta el 18 de marzo.
Breivik señaló que estando en la cárcel intentó publicar dos libros, pero se lo prohibieron.
Además se quejó de que su celda está mal ventilada, poco iluminada, que sufre insomnio y no le dejan hablar por teléfono.
Breivik condenó la falta de contacto con otras personas que no fuesen los guardias de la cárcel, con quienes a veces le permiten conversar.
El 22 de julio de 2011 el ultraderechista hizo estallar una bomba en pleno centro de la capital noruega, provocando la muerte de ocho personas.
Ese mismo día se trasladó a la isla de Utoya, donde mató a 69 personas que participaban en un campamento de las Juventudes Laboristas.
El terrorista fue condenado en 2012 a 21 años de prisión, una pena que puede prorrogarse de forma indefinida.