MADRID (Sputnik) — "Por la forma en la que se ha producido la retirada de tropas, sin ningún calendario o anuncio previo, se puede interpretar como un aviso a Bashar al Asad para que sea flexible en las negociaciones", aseguró el especialista.
Putin ordenó ayer comenzar a partir de este martes la retirada militar de Siria, al dar por cumplida su misión antiterrorista e intensificar, paralelamente, las gestiones para alcanzar la paz.
"Ahora mismo, el Gobierno de Bashar Asad está en parte de las negociaciones en una posición de fuerza gracias al apoyo militar ruso y también el iraní, pero tiene que darse cuenta que ese apoyo puede retirarse, no puede utilizar a los que le apoyan como rehenes de una solución negociada", apuntó Arteaga.
El experto cree que éste es el principal motivo de la retirada porque "es pronto para analizar las reacciones internas de la opinión pública rusa o el coste de las operaciones".