El Servicio Nacional de Inteligencia (NIS, por sus siglas inglesas) reveló que Pyongyang pirateó decenas de teléfonos de altos funcionarios surcoreanos y robó las listas de llamadas, mensajes de texto y el contenido de los aparatos entre finales de febrero y principios de marzo.
Los piratas habrían atraído a los funcionarios hacia enlaces con malware o contenido dañino, ha añadido el NIS, que asegura que uno de cada cinco teléfonos habría sido infectado.
La brecha de seguridad también habría permitido a los piratas acceder a la lista de contactos y conseguir los números de otros altos funcionarios.
Seúl ya alertó dos semanas atrás que la tensión en la península podría multiplicar los ataques de Pyongyang y aumentó la alerta para defenderse de cualquier acto hostil.
Los servicios de inteligencia surcoreanos informaron que Corea del Norte estaba planeando una serie de ataques contra la seguridad nacional que podrían consistir en secuestros, envenenamientos masivos o ciberataques.
Seúl confirmó el mes pasado que los piratas consiguieron controlar la intranet de una compañía nacional a través de cuyo software unos 20 millones de ciudadanos realizan sus transacciones de dinero.
El daño, sin embargo, se limitó al servidor y no a los particulares.
Los cibersoldados norcoreanos también intentaron sin éxito robar las direcciones de email y contraseñas de los trabajadores del operador de ferrocarril nacional.
Pyongyang habría ya controlado unos 100.000 ordenadores en más de 120 países que estaría utilizando para sus ataques coordinados, según el NIS.
Corea del Norte ya atacó en el pasado importantes instituciones del sur como bancos o medios de comunicación y también ha sido acusada de entrar en los sistemas de la multinacional japonesa Sony.