CIUDAD DE MÉXICO (Sputnik) — La región logró "reducir a menos de la mitad el porcentaje de personas que padecen hambre, al pasar de 15,3 por ciento en el trienio 1990-1992 a 6,1 por ciento en el trienio 2012-2014", dijo el mandatario ante ministros y viceministros del subcontinente, observadores de Norteamérica, Europa y de organismos internacionales.
Los países latinoamericanos "hemos actuado con visión y responsabilidad; somos la única región del mundo que alcanzó las metas establecidas en los objetivos de Desarrollo del Milenio", enfatizó Peña.
"Cumplimos las metas de la Cumbre Mundial de la Alimentación", celebró, al disminuir la subalimentación en más de 9 puntos porcentuales: bajó de 14,7 por ciento a principios de los noventa, a 5,5 por ciento a mediados de esta década.
La deuda con los hambrientos
Estos avances son relevantes, sin embargo “no podemos ignorar que en la región, de acuerdo con las más recientes cifras de la FAO, aún hay 34 millones de personas que padecen hambre”, dijo el mandatario.
México ha puesto en marcha políticas que han incrementado sustancialmente su productividad agrícola y “en 2015 las exportaciones agroalimentarias ascendieron a 26.373 millones de dólares, superando en 16,6 por ciento a las registradas al inicio” de su gobierno en 2012, mencionó.
Explicó que este aumento en las exportaciones permitió a México “cerrar el año con una balanza comercial superavitaria en el sector agropecuario y pesquero, por 1.289 millones de dólares”, un logro notable dado que desde hace 20 años esta balanza había sido negativa.
México diseñó y puso en marcha la Cruzada Nacional contra el Hambre, “una estrategia transversal que conjunta los esfuerzos de diversas dependencias del Gobierno de la República para atender a la población en pobreza extrema alimentaria”.
Mencionó algunos de los resultados de la iniciativa, a tres años de su inicio: más de 746.000 personas tienen acceso a una adecuada alimentación en alguno de los casi 8.000 comedores comunitarios instalados en las comunidades más vulnerables.
Más de 580.000 familias pueden adquirir productos básicos a precios preferentes con la denominada Tarjeta Sin Hambre.
Pero según cifras oficiales de 2015, la población en pobreza en México aumentó en dos millones más de pobres desde 2012 –cuando Peña comenzó su mandato–, hasta 2014: subió de 53,3 a 55,3 millones de pobres, de una población total de 120 millones de habitantes.
Es decir, en el primer tercio del manato de seis años de Peña, la pobreza en México subió del 45,5 al 46,2 por ciento de acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval, federal).
En cuanto al hambre, el Gobierno de Peña ha logrado una magra reducción de 11,5 a 11,4 millones de personas que viven en condiciones de emergencia alimentaria, sobre todo en comunidades indígenas del sur del país, que coincide con el mapa de la miseria en el país latinoamericano: solo 90,000 personas salieron de la pobreza extrema hasta el más reciente registro federal oficial de julio de 2015.