Río de Janeiro (Brasil), 3 mar (Sputnik) — El pasado 5 de noviembre, la ruptura de la represa minera de Mariana, en el estado de Minas Gerais, provocó una avalancha de lodo tóxico de 62 millones de metros cúbicos que arrasó los 620 kilómetros de la cuenca del río Doce hasta su llegada a la localidad costera de Linhares, en Espíritu Santo, dejando 17 personas muertas y dos desaparecidas a su paso.
Entre los puntos clave del acuerdo destacó la creación de un fondo de recuperación de 20.000 millones de reales (5.134 millones de dólares) ideado como base financiera para que la minera ponga en marcha los 38 programas de recuperación ambiental y socioeconómica que deberán revitalizar la cuenca del río Doce y las comunidades pesqueras de sus orillas en los próximos 15 años.
"El acuerdo no fue fácil y las empresas implicadas tuvieron una participación fundamental. Es un acuerdo que servirá de símbolo para Brasil y que demuestra que con voluntad es posible enfrentar la mayor tragedia medioambiental que el país haya tenido", declaró el jefe de la Abogacía General del la Unión (AGU), Luis Inácio Adams.
Por su parte, la ministra de Medio Ambiente, Izabella Teixeira, recordó que "la solución no es para olvidar el problema, sino para recordar que todos los problemas tienen solución" y añadió que el acuerdo conseguirá que "cada ciudadano tenga un río Doce con calidad ambiental y calidad de vida".
La minera Samarco pertenece a partes iguales a las multinacionales de la minería BHP Billiton y Vale S.A, esta última, cuya sede se encuentra en Río de Janeiro. se sitúa como la mayor exportadora de mineral de hierro del mundo. Curiosamente la proximidad de su acuerdo con el gobierno brasileño le permitió recuperar los últimos tres días un 18 por ciento el valor de sus acciones en la Bolsa de Sao Paulo.
