"Si la parte surcoreana tiene razones para sospechar que hayamos suministrado ilegalmente (elementos de misiles a Corea de Norte), en contradicción con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, hay que presentar pruebas y si no tienes, les aconsejaría pensar renunciar oficialmente a estas invenciones y pedir disculpas públicas", afirmó.
Calificó estas acusaciones de "irresponsables y muy poco profesionales".
Subrayó que Moscú continúa siendo un participante "concienzudo" de los acuerdos internacionales sobre el control por elementos de misiles, y que "Moscú no está interesado" en la venta de elementos de misiles a Pyongyang.
Tras el anuncio del lanzamiento exitoso de misil de largo alcance Kwangmyongsong por Pyongyang el domingo pasado, los servicios de inteligencia de Corea del Sur denunciaron que algunos componentes del cohete fueron suministrados por Rusia.
El vicepresidente del Gobierno ruso, Dmitri Rogozin, aseguró por su parte en una entrevista con Kommersant que Moscú respeta estrictamente el Régimen de Control de Tecnologías de Misiles.
El Consejo de Seguridad de la ONU condenó el lanzamiento y calificó las acciones de Pyongyang como una violación grave de las resoluciones del organismo.