"Todo lo que deseo para Río es que no pierda su espontaneidad y su alegría jamás. Este es un momento mágico de la ciudad en el que todas las personas se mezclan de verdad", declaró Paes en relación al respiro que proporcionará el Carnaval a una ciudad dividida por las diferencias sociales que se han ido exacerbando en los últimos meses con motivo de la crisis económica.
Tema: El virus Zika
Por su parte, la secretaría de Turismo de Río de Janeiro (Riotur) informó que solamente 23 de los 496 desfiles que animarán las calles de la ciudad durante el Carnaval han resultado afectados por los recortes, mientras que la expectativa de visitantes para esta edición de 2016 es de sobrepasar el millón de turistas extranjeros y permitir unos ingresos de 3.000 millones de reales (768 millones de dólares) a la ciudad.
Precisamente, este viernes los científicos de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el mayor centro de investigaciones médicas de América Latina, alertó a las mujeres embarazadas que acudan al Carnaval a redoblar sus atenciones y evitar las grandes aglomeraciones después de ser descubiertos restos activos del virus en muestras de orina y saliva, algo que refuerza la hipótesis del contagio entre personas.
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Más allá de las advertencias, esta noche se producirá el primero de los grandes desfiles de las escuelas de samba del Grupo A en el Sambódromo Marqués de Sapucaí, el cual fue convenientemente fumigado hace unas semanas, un anticipo de los 12 desfiles del Grupo Especial que se producirán entre el 7 y 8 de febrero y en los que la escuela Beija Flor intentará repetir su éxito de 2015 con un enredo dedicado al poeta carioca "Mineirinho".