El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ya ha avanzado que negociará con todos los partidos, menos con la formación conservadora que dirige el actual presidente en funciones Mariano Rajoy.
El proceso podría alargase un mes. Sánchez recibió ayer el encargo del rey Felipe VI de tratar de formar Gobierno y acabar con la parálisis política que vive España casi mes y medio después de las elecciones.
En una rueda de prensa posterior, el dirigente avanzó que buscaría el apoyo de las "fuerzas del cambio".
Los socialistas cuentan con 90 diputados de un total de 350 escaños en la Cámara
En declaraciones a la Cadena Ser, Hernando ha asegurado que las reuniones se celebrarán "con la máxima transparencia", anunciándolas e informando después, aunque ha dejado claro que "no se pueden retransmitir en streaming", como pidió el líder del partido antiausteridad, Pablo Iglesias.
A Iglesias, que anoche acusó al PSOE de "hipócrita" por querer negociar tanto con Podemos como con los liberales de Ciudadanos, Hernando le ha respondido que "no es el momento de las palabras gruesas ni de las descalificaciones, ni mucho menos de los vetos".
"Nosotros no vamos a plantear vetos a nadie pero no vamos a permitir que se nos planteen, sería absolutamente incomprensible, vamos a hablar con el mejor ánimo", ha dicho, recalcando que los españoles esperan que los políticos estén a la altura de miras de la actual encrucijada.
De entrada, Sánchez no busca el apoyo de las formaciones independentistas, pero posiblemente necesite de sus abstención para formar un Ejecutivo.
El líder socialista no ha avanzado todavía si el PSOE prefiere un pacto de investidura o un Gobierno de coalición.
Sánchez ha reiterado que lo primero es acordar un programa y un proyecto para España. "A los españoles no les importa la composición del Gobierno", ha dicho.