"España necesita grandes transformaciones que van a necesitar dejar atrás el frentismo del Partido Popular (PP), hablamos de un gobierno progresista y reformista porque queremos tender la mano a izquierda y a derecha, porque las grandes transformaciones exigen de una condición necesaria, que no haya frentes en el país", según confirmó este sábado el propio secretario general, Pedro Sánchez, en el Comité Federal de la formación.
El líder socialista también insistió en su "no" al PP y en su voluntad de negociar.
"No voy a ser presidente a cualquier precio, pero tampoco estoy dispuesto a que los españoles paguen el precio de otros cuatro años más de la derecha del PP al frente de las instituciones", apuntó el líder del PSOE, que quedó como segunda fuerza tras las elecciones generales que se celebraron el 20 de diciembre.
No obstante, la militancia del partido tendrá que decidir los acuerdos para formar Gobierno en una votación "que no será vinculante pero sí comprometida políticamente".
El PSOE también decidió este sábado su intención de presentar a Pedro Sánchez a la investidura, si así se lo pide el rey Felipe VI tras la segunda ronda de contactos, que termina el próximo martes.
La formación también acordó celebrar el Congreso del partido en el mes de mayo, en el que elegirán el próximo secretario general.