Además dijo que "La justicia británica convirtió en una farsa el proceso sobre la muerte del exagente ruso Alexandr Litvinenko".
"Todo el proceso se ha convertido en una farsa con entreactos prolongados", comentó a RIA Novosti.
Lugovói también lamentó que "todos nuestros intentos de prestar declaraciones exhaustivas" fueran prácticamente rechazadas por la parte británica.
Asimismo Lugovói opinó que para Londres "el escándalo del polonio llegó a ser un modo cómodo para lograr sus intereses políticos, lo que estuvo claro para mí desde el mismo inicio".
En el informe final publicado este jueves el tribunal británico responsabiliza a Rusia de la muerte del exagente del el Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia, Alexandr Litvinenko.
El juez de instrucción, Robert Owen, expresó la convicción de que Andréi Lugovói y Dmitri Kovtún envenenaron con polonio a Litvinenko el 1 de noviembre de 2006.
El exagente del FSB (y antes el KGB) Alexandr Litvinenko huyó en el 2000 al Reino Unido y murió en Londres en noviembre de 2006 por envenenamiento con polonio 210.
Las autoridades del Reino Unido acusan de su muerte a Moscú, ya que antes de ponerse grave el exagente tomó té con sus antiguos colegas Dmitri Kovtún y Andréi Lugovói.