En un enfrentamiento en el municipio de Parácuaro, estado de Michoacán, murió el lunes a balazos Carlos Rosales Mendoza, alias El Tísico (52 años), quien fue jefe del poderoso Cártel del Golfo en el año 2000, conflictiva región del centro del país, y jefe de los fundadores de otras dos mafias: la Familia Michoacana, y su escisión, los autodenominados Caballeros Templarios, dos pandillas de fanáticos con veleidades religiosas.
En el asesinato del capo —quien había cumplido ocho años en prisión hasta marzo de 2014- "hubo un tema de traición, porque fue invitado a una reunión" en la cual participó otro jefe mafioso prófugo y un líder de los grupos ciudadanos de autodefensas, "cosas buenas no estaban planeando", dijo el Procurador al noticiario radial Imagen.
"En los grupos de autodefensa hubo en su momento gente buena" pero después que el gobierno de Enrique Peña los legitimó y apertrechó para defender a sus comunidades desde 2012, el narcotráfico los ha infiltrado y "se están peleando entre ellos ahora", dijo el Procurador de Michoacán.
El nuevo gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, del Partido de la Revolución Democrática (PRD, centroizquierda), opositor a Peña, ha ordenado el desmantelamiento de las autodefensas.
"Mucha gente que se dedicaba a actividades delincuenciales se incorporaron a los grupos de autodefensa y hoy son las personas que nos están generando problemas; tienen sus controles territoriales y el estado no puede permitir esta situación", dijo el procurador del nuevo gobierno de Michoacán, 2015-2021.
Las autodefensas
Al Tísico "se le podía ver en Morelia —capital de Michoacán-, en centros comerciales; tenía negocios y un restaurante", pero en las últimas fechas comenzó a frecuentar a líderes de grupos de autodefensa, dijo el responsable de la procuración de justicia.
"Engañaron a la sociedad, engañaron al Estado; se levantaron con una bandera blanca y resultó que traían sus intereses ocultos", dijo Godoy.
Ahora ha recibido el mandato de desmantelar el trabajo con las autodefensas de un Comisionado Federal de Seguridad enviado por el gobierno de Enrique Peña a Michoacán, Alfredo Castillo, quien este año fue removido del cargo.
"Todos estos personajes en su momento fueron útiles, hay que festejarlo y hay que reconocerlo; pero hoy por hoy el estado tiene el control", puntualizó.
Algunos integrantes de los grupos de autodefensa "ya mostraron su verdadera cara, nunca tuvieron intención de defender a la sociedad; nunca tuvieron intención de velar por los intereses de las zonas donde ellos vivían, sino lo único que querían era evadir la acción de la justicia", dijo el procurador.
Los cuatro cadáveres fueron encontrados en la autopista Siglo XXI que va de Morelia, hacia el puerto industrial de Lázaro Cárdenas, en las costas del Pacífico.
El Tísico planeó liberar a su jefe, pero fue arrestado hasta 2014 en un penal del estado de Jalisco, desde donde organizó a varios narcotraficantes de Michoacán.
Se volvieron célebres por disputar las rutas a Los Zetas, fundado por desertores del ejército, y al cartel de Joaquín El Chapo Guzmán.
En 2004, sus secuaces Nazario Moreno, alias El Chayo, Jesús Méndez alias El Chango, y Servando Gómez apodado La Tuta formaron la Familia Michoacana, con ribetes religiosos para iniciados, de cuya escisión surgieron Los Caballeros Templarios.
Fue una de las mafias más sanguinarias en la guerra contra el narco en la era del gobierno de Felipe Calderón (2006-2012).
Lea más: La mafia de México es más peligrosa que el EI
Pero el cartel entró a su ocaso cuando El Chango fue detenido en 2011; El Chayo, apodado también El Más Loco, está muerto, La Tuta fue detenido este año 2015 y cartel ha sido desarticulado.