"Para ganar (el primer ministro) Manuel Valls tuvo que polarizar la campaña y el PS hacerse el harakiri", ha dicho Bay este lunes en declaraciones a Radio Classique.
"Esta división puede conducir a una guerra civil", dijo el primer ministro francés.
El PS exhortó el pasado lunes a votar a su principal adversario, la formación conservadora Los Republicanos (LR), liderada por el expresidente Nicolas Sarkozy, para formar un frente republicano contra el FN.
A pesar de que el FN no ha conseguido finalmente acceder al gobierno de ninguna de las regiones, Bay valoró positivamente los resultados.
El FN, agregó, ha avanzado "considerablemente en número de votos".
"Continuamos progresando de manera espectacular", afirmó.
Con una participación del 59,9 por ciento, Los Republicanos de Nicolas Sarkozy obtuvieron un 40,75 por ciento de los votos, el Partido Socialista el 29,23 por ciento y el Frente Nacional el 27,44 por ciento.
El Partido Socialista gobernará en las regiones de Bretaña (51,41 por ciento), Centro (35,34 por ciento), Borgoña-Franco Condado (34,68 por ciento), Poitou-Charentes-Limusín-Aquitania (44,27 por ciento) y Mediodía-Pirineos-Languedoc (44,81 por ciento).
Por su parte, Los Republicanos tendrán el gobierno de País del Loira (42,70 por ciento), Alta Normandía-Baja Normandía (36,43 por ciento), Norte-Paso de Calais-Picardía (57,77 por ciento), Isla de Francia (43,80 por ciento), Champaña-Lorena-Alsacia (48,40 por ciento), Ródano-Alpes-Auvernia (40,61 por ciento) y Provenza-Alpes-Costa Azul (54,78 por ciento).
En Córcega gobernará un partido regional, con el 35,34 por ciento de los votos.
"Hemos sido víctimas de la manipulación y la difamación", ha dicho Marine Le Pen, "pero seremos el principal partido de la oposición en la mayoría de las regiones".