"Si Maduro lee el reclamo de cambio que hizo la población y toma decisiones acertadas para mejorar su nivel de vida, la situación en Venezuela será manejable, pero si no, serán inevitables nuevos reveses para el chavismo", dijo Salamanca, exrector del Consejo Nacional Electoral de Venezuela.
Según Salamanca "la gente, como lo hizo el domingo con sus votos, va a reclamar alivio a la escasez de alimentos y medicinas, y a la carestía, al deterioro acentuado de su vida cotidiana, y si no lo consigue presionará por un cambio político urgente".
En ese marco "Maduro escuchará pedidos de renuncia, se abre la posibilidad de un referendo revocatorio de su mandato al que seguiría una nueva elección presidencial, y eso llevaría seguramente a dos nuevas derrotas muy costosas para el chavismo", estimó.
Los consumidores deben hacer largas filas para adquirir los productos, a precios subsidiados, en supermercados, farmacias y mercados gubernamentales.
El propio Maduro denunció en varias oportunidades la guerra económica contra Venezuela e intentos de desestabilización.
Maduro ha convocado a su Partido Socialista Unido de Venezuela a emprender "una nueva etapa, económica-productiva" del proceso iniciado en 1999, pero no ha considerado los pedidos del sector empresarial de eliminar controles de precios y de cambio.
"Yo podría decir (que) ha triunfado la guerra económica, ha triunfado una estrategia para vulnerar un proyecto de país…. una estrategia de esconder los productos, de encarecerlos, en una guerra sin parangón, sin igual", afirmó el presidente venezolano.
Para Salamanca "la gente presionará por condiciones de vida diferentes y puede llegar un momento en que, si crece la conflictividad, el chavismo podría ver a Maduro como una pieza prescindible y buscar vías para relevarlo".
Hasta ahora, los líderes de la oposición han dicho que su objetivo es restablecer un equilibrio de poderes desde la Asamblea Nacional que se instalará el 5 de enero de 2016.