"Hemos declarado reiteradamente de manera pública que el petróleo de los territorios ocupados de Siria e Irak se dirige a otros países, en particular, a Turquía, las pruebas que demuestran estos hechos serán presentadas de manera formal a Naciones Unidas y a todos los estados interesados", dijo Lavrov.
Al mismo tiempo, el canciller ruso advirtió que actualmente urge sellar la frontera entre Siria y Turquía que enfrascarse en "los prolongados procedimientos de una investigación".
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Este miércoles, el Ministerio de Defensa ruso acusó a Turquía de ser el mayor comprador del crudo de los terroristas del Daesh, un grupo proscrito en Rusia, un negocio clandestino en el que estaría implicada la cúpula turca.
Anteriormente el jefe de la Dirección General de Operaciones del Estado Mayor ruso, Serguéi Rudskói, mostró imágenes satelitales en las que se ven caravanas petroleras que avanzan por el territorio controlado por los terroristas rumbo a Turquía.