“La Bolsa reaccionó en el último año y medio, previendo que no seguía el kirchnerismo gobernante y acertó, por eso ahora el precio de las acciones tuvo una pequeña bajada”, indicó Ferreres.
El triunfo de Macri pone fin a tres administraciones consecutivas de centroizquierda a cargo de Néstor Kirchner (2003-2007) y de su esposa Cristina Fernández (2007-2015).
Estos valores “están bien” y son comparables a los de otros mercados de América Latina, según el presidente de la consultora Orlando J. Ferreres y Asociados.
El índice Merval de la Bolsa de Buenos Aires descendió el martes un 0,4 por ciento hasta los 13.393 puntos. El día anterior había caído un 5,11 por ciento, tras haber acumulado utilidades superiores al 25 por ciento en las últimas cuatro semanas.
“Ya hubo anteriormente compras especulativas de acciones y ahora da la impresión de que hay cierta tendencia a vender”, indicó el consultor.
Desde principios de 2014 la mayoría de los fondos de inversión internacional estuvieron comprando papeles en un 100 por ciento en dólares, según Ferreres, una ganancia que ahora buscan obtener con el fin de que esté disponible para los bonos de fin de año de las empresas.
“Hay un interés de nuevos inversores por entrar al mercado, por lo que empiezan a comprar”, añadió.
Esto se relaciona con la evolución del “riesgo país”, un índice que mide la capacidad de pago de los Estados sobre sus adeudos, y que se dispara cuando hay incertidumbre.
El de Brasil, que llegó a estar a 200 puntos básicos en el último período, aumentó a 397 este martes, mientras que el de Argentina, que alcanzó en enero de 2014 los 1.100 puntos, se sitúa ahora en 480.
“Por lo general, las empresas en Argentina varían menos que en otros países. La bajada del riesgo país hizo aumentar el precio de las acciones en dólares”, señaló el experto económico.
Los inversores internacionales que no quieren preparar un proyecto de inversión con contadores y analistas compran directamente las acciones que cotizan de forma pública en la bolsa argentina.
Dólar paralelo
Por otra parte, la evolución del tipo de cambio informal o paralelo, conocido en Argentina como “blue”, subió a unos 15 pesos argentinos el dólar, en una oscilación esperable, a juicio del economista.
“El dólar paralelo fluctúa, más que baja o sube; tiene variaciones pero no demasiado grandes”, indicó. A su juicio, “alguna entidad oficial está comprando dólares en el mercado, con bonos en dólares que pueden vender”.
El Gobierno que asumirá el 10 de diciembre es percibido como favorable a ubicar al mercado como rector central de la economía, a diferencia de la administración saliente, que dio gran preponderancia al papel regulador del Estado.
Según Ferreres, la administración de Macri dará una perspectiva estratégica al país y a eso apostó el mercado.
El siguiente paso que todavía no se ha apreciado en el mercado es la compra y venta de empresas en sectores estratégicos, como las de energía e infraestructura y, por otro lado, compañías de productos para el hogar, como frigoríficos, televisores o lavadoras, en las que puede haber un interés internacional, observó.
“No parece que Macri vaya a hacer alguna privatización ahora, porque tiene que generar otro entorno para que eso pueda ser posible”, juzgó el consultor.
Hay compañías, en todo caso, que han comenzado a realizar adquisiciones, sobre todo en el sector de bodegas vitivinícolas. Se trata de “empresas más pequeñas que pasan a manos de compañías más grandes para reducir gastos fijos de dirección”, detalló.
Macri todavía no ha develado los nombres de su equipo en este rubro, pero explicó en una rueda de prensa el lunes que no habrá Ministerio de Economía, sino uno de Hacienda y Finanzas que formará parte de un gabinete económico, integrado asimismo por las carteras de Energía, Producción, Trabajo, Transporte, y Agricultura, Ganadería y Pesca.
El presidente electo también ha dicho que una de sus primeras medidas será eliminar el control de cambios.