"Los grupos terroristas que Washington califica de moderados reciben todo tipo de ayuda extranjera, como dinero, armas modernas, control y dirección, de lo que dan testimonio los estados operativos existentes tanto en Turquía como en Jordania", afirmó.
En tanto, un grupo de senadores se dirigió al Pentágono, el Departamento de Estado y la CIA con la solicitud de poner fin al programa de entrenamiento y abastecimiento de los militantes de la oposición siria debido a su poca efectividad y debido a que ello conduce a un empeoramiento del conflicto y amenaza a EEUU.
Además, lo senadores destacaron que los 500 millones de dólares entregados permitieron entrenar a menos de 100 combatientes en vez de los previstos 5.000.
Desde marzo de 2011, Siria sufre un conflicto armado que ha costado la vida a más de 220.000 personas, según estimaciones de la ONU, o más de 330.000, según la ONG Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, que realiza el seguimiento desde el Reino Unido.
Las tropas gubernamentales sirias se enfrentan a distintas facciones armadas, entre ellas los terroristas del Estado Islámico y del Frente al Nusra, vinculado a Al Qaeda.