En particular, fueron destruidos tres almacenes con armas y municiones, precisa un comunicado de la Defensa rusa.
En Ildib también quedaron destruidos cuatro puntos de mando del EI.
"Las edificaciones donde se hallaban los insurgentes quedaron totalmente aniquiladas", indica el documento.
Además, fueron asestados golpes contra posiciones del EI en Raqqa donde los aviones de combate rusos Su-34 destruyeron un centro de entrenamiento de miembros del Estado Islámico y un almacén de armas.
En los primeros dos días, según el Ministerio de Defensa, la aviación rusa destruyó más de una decena de instalaciones de los terroristas.
El embajador sirio en Moscú, Riad Haddad, confirmó previamente que los ataques rusos se dirigen solo contra los grupos terroristas.
Paralelamente, una coalición encabezada por EEUU continúa desde septiembre de 2014 bombardeando al EI sin la autorización del Consejo de Seguridad de la ONU ni la solicitud de las autoridades sirias.