Castro y Obama se reunieron esta mañana en Nueva York en forma paralela a la 70ª Asamblea General de la ONU.
Se trata de la segunda vez que ambos mandatarios se encuentran desde la Cumbre de las Américas celebrada en abril en Panamá.
En la reunión de este martes, Castro subrayó que el bloqueo es "una violación masiva y sistemática de todas las familias cubanas", y que además viola "las reglas universalmente aceptadas del comercio internacional y de la libertad de negación", así como los "derechos establecidos en la Carta de las Naciones Unidas".
"El bloqueo está en completa aplicación, no ha sido en absoluto modificado. El ritmo del proceso de normalización de las relaciones entre EEUU y Cuba dependerá del levantamiento del bloqueo", subrayó el canciller cubano.
En su encuentro con Obama, que fue calificado de "respetuoso y constructivo", Castro "reiteró que para que haya relaciones normales debe ser levantado el bloqueo, que causa daños al pueblo cubano y afecta los intereses de los ciudadanos estadounidenses, entre otros asuntos que son lesivos a la soberanía cubana".
El mandatario caribeño también destacó las decisiones ejecutivas de Obama para aliviar el bloqueo, pero subrayó la "necesidad de profundizar su alcance".
Por último, Castro "ratificó la voluntad de Cuba de construir un nuevo tipo de relaciones basadas en el respeto y la igualdad soberana".
En diciembre de 2014, La Habana y Washington dieron un paso histórico, cuando Castro y Obama anunciaron que sus Gobiernos iniciaban negociaciones para restablecer relaciones diplomáticas.
El 20 de julio, los dos países reabrieron sus respectivas embajadas para fortalecer el proceso de acercamiento.