Moscú ha declarado en más de una ocasión que seguirá ayudando a los dirigentes sirios como ayuda a los de Irak y de otros países que afrontan la amenaza terrorista.
"Nuestra cooperación técnico-militar persigue precisamente estos objetivos", recalcó.
Anteriormente el Kremlin informó que Rusia comenzó a suministrar armas al Gobierno de Siria mucho antes de que en el país comenzara el actual conflicto militar.
Bulgaria y Ucrania anunciaron esta semana que cerrarían sus corredores aéreos para los aviones rusos que se dirigen a Siria.
Desde marzo de 2011 Siria está inmersa en una contienda que se ha llevado la vida a más de 220.000 personas, según estimaciones de la ONU, o más de 330.000, según la ONG Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, que monitorea las hostilidades desde el Reino Unido.
Las tropas gubernamentales se enfrentan a distintas facciones armadas, entre ellos los terroristas del grupo EI y del Frente al Nusra, vinculado a Al Qaeda.