Según el enviado, "el OIEA está al tanto de los incidentes acontecidos por el uso del combustible de Westinghouse".
"Lamentablemente, nuestras preocupaciones se mantienen", lamenta, "quisiéramos sinceramente que las cosas fueran distintas, pero no podemos ignorar realidades objetivas: las amenazas en materia de seguridad nuclear se mantienen vigentes", señaló.
Berdénnikov señaló que Moscú "observa que se sigue experimentando con cargas de combustible nuclear de otros países en reactores construidos en Rusia", cuando se ha mostrado de sobra su incompatibilidad.
"En la actualidad todavía quedan dudas de si son capaces los productores extranjeros, incluyendo a Westinghouse, de fabricar un combustible que funcione en los reactores fabricados por nosotros, sin que tengan lugar accidentes nucleares", indicó.
Según el enviado especial de la Cancillería rusa, "los correspondientes incidentes debido al uso de combustible norteamericano son bien conocidos", señalando que el OIEA también estaba al tanto de estos hechos.