"En realidad la crisis no es provocada por el gran número de los inmigrantes que llegan, aunque es muy grave para los países receptores, sino en general por una respuesta incoherente", dijo Spindler en entrevista a esta agencia.
Constató que los países del Viejo Continente optan por aislarse, "construyendo muros y vallas".
"Necesitamos una respuesta común, Europa tiene recursos y medios para ello", recalcó.
La situación no es nada nueva, continuó Spindler: en 1956 decenas de miles de refugiados húngaros fueron repartidos en pocas semanas entre países europeos.
Para resolver el problema actual se necesita garantizar la llegada de los refugiados de modo legal, identificando a los que necesitan más protección, según el portavoz de Acnur.
Además llamó a otros países, incluyendo los de América Latina, a contribuir al arreglo de la crisis.
Spindler señaló que la crisis actual es precisamente de refugiados, y no migratoria, puesto que las personas abandonan sus países no para encontrar trabajo, sino para estar a salvo de los conflictos internos.