Además evocó que su país era líder en el mercado de artículos de lujo, el sector de la maquinaria agrícola, herramientas y alimentos.
"Conseguir cuotas de exportación a los mercados de otros países requiere años e inversiones. Nuestras gestiones anteriores han sido en vano. Ahora, pese a mantener una buena posición durante varios años, otros países nos sustituirán", apuntó.
Recuperar este mercado, añadió, le va a costar mucho esfuerzo a Italia cuando un día se levanten las sanciones.
Al mismo tiempo, Ferrarini cuestionó la unidad de Europa.
"Creo en el euro y la Europa unida, pero los últimos sucesos han puesto de relieve que Europa no está unida. Esto ha quedado claro con la crisis con Rusia y Ucrania, así como la crisis migratoria", subrayó.
Además denunció que EEUU ha bloqueado a Europa en su pugna con Moscú.
"Europa no puede actuar sin el visto bueno de EEUU (…) Como una empresaria y ciudadana debo decir que me preocupan los focos de tensión geopolítica que dañan al sistema económico", remarcó.
Ferrarini apeló al sentido común de EEUU para superar las discrepancias con Rusia, como lo hizo con Irán y Cuba.
"Deseo con todo el corazón que el sentido común y la realidad prevalezcan en EEUU y llegue a un acuerdo con Rusia para que Italia pueda reanudar sus exportaciones a Rusia", concluyó.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la crisis en Ucrania y la adhesión de Crimea a Rusia en marzo de 2014.
EEUU y la Unión Europea aprobaron varios paquetes de sanciones contra sectores enteros de la economía rusa.
El Kremlin respondió con una limitación a las importaciones agroalimentarias de estas naciones.