Según el asesor del presidente ruso, Yuri Ushakov, se tiene previsto firmar 30 documentos bilaterales.
El auge de las relaciones bilaterales
A juicio de Putin, los lazos chino-rusos "han alcanzado ahora un nivel sin precedentes y siguen desarrollándose".
"No estoy de acuerdo en que las restricciones ilegales impuestas por ciertos países occidentales contra Rusia tengan un impacto negativo sobre la cooperación económica chino-rusa", comentó al explicar que "al contrario, animaron a nuestras empresas a desarrollar los lazos empresariales estables con China".
Putin subrayó que China y Rusia están dispuestas a intensificar su cooperación financiera, en particular, planean a pagos en divisas nacionales, pretenden ampliar los lazos interregionales y la cooperación transfronteriza, así como mejorar las infraestructuras de transporte entre las dos naciones.
Energía y economía
"La energía sigue siendo la esfera clave y nuestros países continúan acercándose a la creación de una alianza energética estratégica que, a mi juicio, jugará un importante rol en las relaciones económicas internacionales", está convencido Putin.
El año pasado Gazprom y CNPC firmaron un contrato para el suministro de gas –38.000 millones de metros cúbicos anuales, por un período de 30 años– a través del gasoducto Fuerza de Siberia.
Por el momento las partes analizan la construcción de una segunda ruta de suministros, conocida como Fuerza de Siberia 2, que enviaría otros 30.000 millones de metros cúbicos al año.
Putin precisó que entre los dos Estados hay un gran potencial para la cooperación energética.
El mandatario señaló que "con todas las diferencias entre China y Rusia, ambos países tenemos entre nuestros objetivos el desarrollo de la estructura de la economía para favorecer sectores de alta tecnología".
Según Putin, Pekín y Moscú "también tienen prioridades industriales muy semejantes: energía nuclear, exploración espacial, nuevas tecnologías de información, protección ambiental, eficiencia energética", y otras.
Los dos países "tienen un enorme potencial para una cooperación empresarial más estrecha", opinó el presidente.
Escenario internacional
El líder ruso dijo que, en vista de la complicada situación internacional actual, la cooperación chino-rusa tiene una nueva importancia desde el punto de vista de mantener y fortalecer la estabilidad y la seguridad globales y regionales, así como de ayudar a encontrar una respuesta eficaz a los retos globales.
La situación internacional, según Putin, es cada vez más impredecible.
"Entre los problemas endémicos está el deseo constante de ciertos Estados de conservar su dominio en los asuntos globales a cualquier precio", enfatizó.
A juicio del presidente, estos Estados declaran las normas de democracia, la supremacía de ley y derechos humanos en sus países y al mismo tiempo "ignoran lo mismo en el arena internacional".
Moscú y Pekín tienen puntos de vista semejantes sobre las causas, la historia y las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial y, según Putin, "ahora tanto en Europa como en Asia, somos testigos de los intentos de falsificar la historia de la Segunda Guerra Mundial, de promover interpretaciones tergiversadas de los hechos".
El mandatario añadió que "la meta de estas especulaciones históricas es obvia: las usan en los juegos geopolíticos sospechosos que tienen por objetivo sembrar enemistad entre países y naciones".