La empresa sólo consiguió su permiso dos meses atrás, pero estuvo operando sin él durante los anteriores ocho meses, según la agencia de noticias oficial Xinhua.
"La compañía ha estado gestionando materiales químicos sin licencia durante un tiempo", ha dicho un ejecutivo no identificado de la compañía a Xinhua.
Las detenciones se han precipitado en las últimas horas después de que las autoridades prometieran una investigación a fondo.
Muchos funcionarios están siendo investigados también por negligencia, según la prensa china.
Los afectados por las dos potentes explosiones se preguntan cómo pudo la compañía almacenar los materiales peligrosos a apenas 500 metros de viviendas cuando la ley exige una distancia mínima de un kilómetro.
La prestigiosa revista de investigación Caijing reveló días atrás que uno de los accionistas de la compañía es el hijo del que fuera jefe de la policía del puerto de Tianjin.
El accidente de la semana pasada en la ciudad portuaria del norte de China ha causado 114 muertos y 57 desaparecidos, además de 700 heridos.