El incidente tuvo lugar el pasado 4 de agosto, cuando ocho soldados de Corea del Sur inspeccionaban la zona, informa Kyodo.
Según la Defensa, el artefacto explosivo no es antiguo y es "evidente que fue instalado por Corea del Norte".
Según Seúl, lo ocurrido es una "franca provocación" del Norte.
Por su parte, Yonhap sostiene, que la colocación de las minas en la zona desmilitarizada buscaba obstaculizar la celebración de maniobras conjuntas entre las fuerzas de Corea del Sur y EEUU.