"Las sanciones impuestas por los países occidentales contra Rusia debido a la crisis ucraniana afectaron inevitablemente a la corporación y a sus organizaciones subsidiarias; las sanciones tuvieron la mayor incidencia en las filiales y no en la propia corporación, ya que ésta no recibe financiación extranjera", dice el documento.
Según el informe, las sanciones podrían perjudicar el atractivo de los proyectos de Rostec para inversiones, la capitalización de su marca y los ingresos cobrados por la compañía con las acciones de sus filiales.
Las personas físicas y jurídicas de la Unión Europea no pueden suministrar artículos de doble uso (civil y militar), financiar o prestar servicios de mediación para artículos de doble uso a Bazalt, Kaláshnikov, Sirius y otras empresas subsidiarias de Rostec.
Los representantes de la UE tampoco pueden conceder préstamos por más de 30 días a la corporación de construcción militar Oboronpom y sus filiales, agrega el informe.