Los expertos concordaron en la necesidad de realizar una contrapropaganda efectiva para minimizar el atractivo que pueda tener el Estado Islámico entre los jóvenes.
Según el presidente del Instituto de Estudios del Medio Oriente en Moscú, Evgueni Satanovski, el tema del Estado Islámico comenzó a preocupar en Rusia solo luego de que una estudiante rusa escapara a Siria para unirse a la organización. Sin embargo, añadió, la situación en Europa Occidental es mucho peor en este sentido.
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Los reclutadores que intentan atraer a jóvenes rusos al Estado Islámico son más efectivos que el sistema educativo ruso, cree el director de la facultad de Estudios Orientales de la Escuela Superior de Economía de Moscú, Alexéi Maslov. "Resulta preocupante que menos del 15% de las instituciones de educación superior en Rusia preparen a especialstas en estudios islámicos", lamentó. Maslov cree que uno de los puntos propagandísticos del Estado Islámico es que el islam es una religión superior y son los aspectos místicos de la religion los que atraen a los jóvenes.
Por su parte, el director del Centro de Investigaciones del Medio Oriente y Asia Central, Semión Bagdasarov, hace hincapié en que debe haber un control más rígido contra la promoción del extremismo. "Es necesario tomar medidas de contrapropaganda y eso es una tarea que le atañe al Estado en la que deben participar los servicios de inteligencia, el Ministerio del Interior y el de Educacion. ¿Pero cómo es posible si en nuestro país no hay especialistas? Hay que empezar programas de educación desde ya".
El Estado debe tomar medidas para explicar por qué el Estado Islámico no es un ejemplo a seguir y es el Parlamento quien debe fiscalizar la labor de los servicios de inteligencia, cree el miembro del comité parlamentario de asuntos religiosos, Serguéi Obvujov. "Subrayamos que es el Parlamento el que debe exigir que el Gobierno asuma este problema, por eso intentamos hacer que los funcionarios públicos asuman la responsabilidad de tomar medidas a nivel de rectores de universidades", dijo el parlamentario.
Tema: Atrocidades del Estado Islámico
La propaganda del Estado Islámico es más efectiva entre los musulmanes de bajo nivel educativo que no conocen su propia religión a fondo y que no entienden de política, cree Borís Dolgov, miembro del Centro de Estudios Árabes e Islámicos de la Academia de Ciencias de Rusia. Los reclutadores del Estado Islámico, agrega, se aprovechan de las frustraciones sociales de estos jóvenes y esto funciona en muchos. De hecho, explica, en algunos casos la promesa de pago a cambio de combatir es suficiente para atraer a miembros nuevos. El experto añade que se necesitan medidas complejas, incluyendo la contrapropaganda, en las mezquitas, que expliquen que los crímenes que los terroristas cometen contra los civiles son crímenes contra el islam.