"El tribunal no debe ser usado como un instrumento de acusación y un instrumento para escalar aún más la guerra civil en Ucrania; al fin y al cabo, las victimas de MH17 son las víctimas de esta guerra y tenemos que hacer todo lo posible para cesarla", dijo.
Anteriormente Malasia presentó al Consejo de Seguridad de la ONU un proyecto de resolución para crear un tribunal internacional que investigue el siniestro del MH17. La propuesta recibió el apoyo de Australia, Bélgica, Países Bajos y Ucrania.
Hunko afirmó también que las negociaciones sobre la creación de un tribunal internacional son prematuras antes de que los Países Bajos, cuyas autoridades se encargan de investigar el siniestro, publiquen el informe final sobre la catástrofe.
"Es un momento inapropiado para debatir sobre el tribunal porque no tenemos el informe de los Países Bajos, puede ser que después de que esté publicado en octubre, podamos hablar sobre el tribunal", dijo.
El Boeing 777 de la compañía Malaysia Airlines, que realizaba el vuelo MH17 de Ámsterdam a Kuala Lumpur, fue derribado el 17 de julio pasado en la región de Donetsk, en el este de Ucrania, los 298 ocupantes de la aeronave, en su mayoría holandeses, murieron.
Un informe preliminar sobre la investigación de la catástrofe, publicado por los Países Bajos, atribuye el siniestro "a daños estructurales del avión provocados por una acción externa", sin indicar cuál.
Kiev responsabilizó de la catástrofe a las milicias de la autoproclamada República Popular de Donetsk, pero estas rechazaron las acusaciones afirmando que no disponían de armas capaces de derribar un avión a más de 10.000 metros de altura.