“No analizamos la posibilidad de votar a favor de introducir” estas enmiendas, dijo el jueves a los periodistas el líder de la fracción parlamentaria Samopomich (Autoayuda).
El dirigente de la fracción del Partido Radical, Oleg Liashko, también se declaró en contra de que sea fijado el estatus especial.
“Fijar en la Constitución el estatus especial para Donbás es una catástrofe para Ucrania”, opinó, añadiendo que “nunca votará por eso”.
La tarde del miércoles, Petró Poroshenko remitió a la Rada (Parlamento nacional) el borrador de enmiendas a la Carta Magna que concede más autonomía a las regiones del país y en particular establecen un estatus especial para la conflictiva región de Donbás.
La versión inicial del texto no preveía ningún estatus especial para Donbás, lo que suscitó críticas por parte de las repúblicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk.
"El proyecto presentado el día 1 (de julio) y modificado el día 15 no fue discutido con representantes de Donbás", dijo Deinego a RIA Novosti, y añadió que esto “lo hace Ucrania por su cuenta".
Desde Rusia también surgieron voces de alerta contra la iniciativa del presidente Petró Poroshenko.
Mijaíl Fedótov, presidente del Consejo ruso para los Derechos Humanos, advirtió que si las enmiendas a la Constitución ucraniana no se corresponden con los acuerdos de Minsk, el conflicto en Donbás volverá a estallar.
Agregó que si corresponden, "significa que triunfó el sentido común y si no, entonces el problema volverá a aparecer".
Sin embargo, el primer vicejefe de la facción “Bloque de Petró Poroshenko” de la Rada (parlamento ucraniano), Igor Kononenko, afirmó que las enmiendas a la Constitución ucraniana no prevén un estatus especial para Donbás.
“Las cláusulas tienen carácter temporal, en las cláusulas transitorias de la Constitución solo se destaca que hay particularidades de autogestión en algunas zonas, nada más”, dijo.
“Ni la Constitución ni las cláusulas transitorias hacen mención del estatus”, dijo.
Actualmente, en la zona está vigente un alto el fuego logrado por el Grupo de Contacto Trilateral (Rusia, Ucrania y la OSCE), encargado de buscar una solución a la crisis en el país eslavo.
Con anterioridad, los líderes de Alemania, Francia, Rusia y Ucrania acordaron implementar los acuerdos conseguidos en la capital bielorrusa para detener el conflicto armado en el sudeste ucraniano y realizar reformas constitucionales antes de que termine el año.