Según el mandatario, “la federalización no se menciona; Ucrania ha sido, es y será un Estado unitario”.
“El proyecto solo admite la posibilidad de un autogobierno local específico en determinadas unidades territoriales de las regiones de Lugansk y Donetsk, que definirá una ley”, explicó.
A su juicio, las enmiendas que propuso no violan los acuerdos de Minsk.
“Solo de este modo mostraremos al mundo y a la población ucraniana nuestra unidad”, declaró Poroshenko.
El mandatario dijo que “nadie presiona a Ucrania, al poder ucraniano ni a mí, como el presidente del país”, y precisó que son las autoridades de Ucrania que decidirán la situación.
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Al mismo tiempo, el presidente añadió que “los socios estadounidenses y europeos están interesados en el éxito del proceso constitucional” y si el Parlamento no apoya las enmiendas, el país se quedará sin su ayuda.
“No tenemos derecho de crear una situación con nuestras propias manos en la que Ucrania se quede a solas con el agresor”, subrayó.
"No puede haber descentralización en los ámbitos de defensa, seguridad nacional, relaciones internacionales y control en materia de derechos humanos y libertades", explicó.
La tarde del miércoles, el líder ucraniano remitió a la Rada (Parlamento nacional) el borrador de enmiendas a la Carta Magna que conceden más autonomía a las regiones del país y, a través de una disposición transitoria, regulan el régimen de autogobierno en las zonas de Donbás controladas por las milicias locales.