Mas, que no encabezará la candidatura, se reserva la presidencia del Gobierno catalán, en caso de ganar en las urnas.
Las plataformas civiles soberanistas —Ómnium Cultural, Asamblea Nacional Catalana (ANC) y la Asociación de Municipios por la Independencia- apoyaron el pacto y pidieron que tras los comicios se forme "un gobierno catalán de concentración para llevar el país a la independencia", en palabras de Muriel Casals de Ómnium Cultural.
El debate catalán se había centrado estas últimas semanas en la creación de una lista unitaria sin políticos. Mas había amagado con no convocar las elecciones si no había una candidatura que contase con su presencia, aunque no necesariamente como número uno.
Los nacionalistas de izquierda de la CUP anunciaron hoy que se presentarán en solitario porque sólo estaban de acuerdo con los integrantes de la casi cerrada lista unitaria en el carácter plebiscitario de las elecciones.
"Fuimos a la reunión de trabajo dispuestos a estudiar y aceptar únicamente la hipótesis avalada por ERC, Ómnium y ANC en la que se planteaba una lista sin partidos".
Pero "nos encontramos un tablero cambiado donde la idea inicial se descartó rápidamente", estimó Fernández.
Un sondeo publicado el pasado domingo por el diario catalán La Vanguardia revelaba que la opción independentista sólo sumaba con una lista única que incluía a CDC, ERC y la CUP.
Los tres partidos nacionalistas por separados no lograban la mayoría absoluta necesaria para avanzar en la hoja de ruta secesionista.