“No vamos a apresurarnos ni dejaremos que nos metan prisa”, ha dicho Kerry en una breve comparecencia ante la prensa.
Kerry ha declarado que “si al fin y al cabo podemos alcanzar un acuerdo, debe ser uno que pueda resistir la prueba del tiempo” y ha precisado que “no será una prueba de días o semanas o meses, sino de décadas”.
A su juicio, “decisiones difíciles no se volverán más fáciles con el tiempo y de una manera o de otra estas decisiones deben ser tomadas muy pronto”.
También, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, indicó en su cuenta de Twitter que “estamos trabajando duramente pero no nos apresuramos para realizar el trabajo”.
A su vez una fuente iraní cercana a las negociaciones manifestó a RIA Novosti que “los socios occidentales del Grupo 5+1 cambiaron y endurecieron ayer su posición”, por lo que ahora “es más difícil para ellos coordinarse”.
El Grupo 5+1 de mediadores internacionales (Gran Bretaña, China, Francia, EEUU, Rusia y Alemania) e Irán habían acordado en Lausana que tras la firma de un acuerdo universal Teherán durante 15 años dejará de enriquecer uranio por encima del 3,67 % y reducirá sus reservas actuales hasta 300 kilogramos.
Los mediadores con participación de la Unión Europea e Irán, están elaborando el acuerdo definitivo sobre el programa nuclear iraní.
El documento tenía que estar listo antes del 30 de junio, pero después las partes decidieron prolongar este trabajo por unos días.