La falta de un acuerdo con la Troika de acreedores —formada por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el el Fondo Monetario Internacional (FMI)- abre nuevas perspectivas, según sostiene Farage, para que el "pueblo griego obtenga la libertad que necesita para prosperar".
"La pertenencia al euro durante tanto tiempo ha empobrecido al país y la crisis se ha convertido en una oportunidad", resaltó el dirigente de una formación que aboga por la salida de Reino Unido del bloque de los Veintiocho.
La continuidad de Reino Unido en la UE se decidirá en un referendo que el primer ministro británico, David Cameron, convocará en diciembre de 2017 a más tardar.
El dirigente conservador debe antes cerrar la renegociación con sus socios continentales sobre los términos de la adhesión de Londres a la UE.
Las negociaciones han pasado a un nivel técnico entre los respectivos funcionarios, con vistas a presentar una propuesta consensuada de reforma en la reunión del Consejo de Europa del próximo diciembre.