"No tenemos y no tendremos como objetivo escuchar las conversaciones del presidente Hollande", expresó a la agencia Sputnik.
Anteriormente este martes, WikiLeaks publicó documentos según los cuales la NSA de EEUU estuvo vinculada a la intercepción de conversaciones de una serie de altos representantes de Francia, incluyendo al actual presidente Hollande, así como a sus predecesores Nicolas Sarkozy y Jacques Chirac.
Los datos en poder de los medios de prensa francesa indican que la vigilancia de las actividades de los presidentes de Francia se realizó al menos desde 2006 hasta mayo de 2012.
Además, se escucharon las conversaciones de una serie de ministros, altos funcionarios y diplomáticos, incluyendo al embajador de Francia en EEUU.